Subscribe in a reader

histonotas: ERZSÉBET BATHORY - ¿VAMPIRESA O SANGUINARIA?

miércoles, 30 de septiembre de 2009

ERZSÉBET BATHORY - ¿VAMPIRESA O SANGUINARIA?

Porque la sangre de todo ser viviente contiene su vida".Levítico, 17,14


Algo extraño sucede en Transilvania. En esta región oscura, boscosa y montañosa, hoy perteneciente a Rumania, antes parte de Hungría, los campesinos relatan desde hace siglos extrañas historias con gran éxito de credibilidad. O son unos consumados mentirosos, o son tan supersticiosos e imaginativos que creen que todos los gatos son demonios, o bien la región es de las más emocionalmente insalubres del planeta.

Hace siglos personificaron la leyenda inmemorial de los no muertos, vampiros nocturnos, en el no menos temible Vlad Tepes, noble guerrero sanguinario de existencia histórica allá por 1450, al que adjudicaron sombrías correrías post mortem en busca de sangre humana de cualquier grupo y factor, preferiblemente femenina. Ya sabemos el resultado: Drácula llegó para quedarse y multiplicarse.

Cien años más tarde, en la misma región, las andanzas de una mujer dieron germen a otra leyenda, tan cruel y repugnante como la de Drácula pero más terrena y “verosímil” ya que fue apoyada por las actas de un juicio en toda regla. Desde ese aspecto, podríamos decir que nada hay más fehaciente que un buen sumario judicial, pero ¡ay! no olvidemos que en esa época los interrogatorios incluían invariablemente horrendas torturas, y los torturados no son muy creíbles, sobre todo cuando manifiestan coincidencia hasta en los detalles, y certifican hechos que, casualmente, son idénticos a los preguntados por los inquisidores. Aunque, en este caso, hay denuncias sospechosamente unánimes efectuadas por campesinos que.....bueno, veamos el relato. Ustedes juzgarán o se documentarán luego más a fondo.

Nacida en 1560, Erzsébet Bathory era noble por los cuatro costados. Entre sus parientes figuraban un cardenal y un príncipe de Transilvania. Su primo, el conde Thurzo fue primer ministro de Hungría, y hasta el rey Esteban de Polonia se contaba entre sus familiares. Como nadie es perfecto, tenía una tía lesbiana matizada de sadismo a quien visitaba con frecuencia; un tío hechicero, su ama de cría también era bruja y siguió rodeándose de esta linda gente a lo largo de su niñez y adolescencia.

A los 11 años fue prometida al conde Ferencz Nadasdy. Como era costumbre, la enviaron a vivir con su futura suegra, Ursula (¿Quién introdujo esa costumbre? ¿Drácula?). Por supuesto, se vieron y se odiaron. Erzsébet no perdió oportunidad de abrumar a su futura suegra con su superior nobleza y riqueza. Un paraíso.

Ahí dicen las malas lenguas que Erzsébet a los 13 años hizo una travesura infantil con un peón de la suegra, a resultas de la cual quedó embarazada. Como corresponde, el muchacho fue castrado y lanzado a los perros, y Erzsébet fue enviada a un conveniente castillo familiar para que pariera. Se hizo desaparecer al bebé. Para no tener nuevamente esos problemas, a los 15 años la casaron con el noviecito Ferencz. El esposo agregó el ilustre apellido de Erzsébet al suyo, para honrar la superior nobleza de ella y, de paso, para trepar en la escala social.

Al poco tiempo el marido partió a la guerra. No hay más que verle la cara para darse cuenta que la paz del hogar no era lo suyo. En la guerra, demostró ser satisfactoriamente salvaje, y conquistó el sobrenombre de El Guerrero Negro.

Nueve años pasó el guerrero empalando turcos, Se conoce parte de la correspondencia con su mujer. Ella le describe detalladamente las diversas torturas a que somete a sus doncellas para educarlas en la obediencia, lo que él aprueba como cosa normal. Así eran los tiempos, y el servicio doméstico siempre fue un problema. No me gusta entrar en detalles escabrosos, pero el método educativo que empleaba Erzsébet se basaba en golpes, algún hueso roto, agujas bajo las uñas y ocasionales mordiscos en cuello, rostro o senos de las doncellas (todos los castigos se refieren a doncellas; criadas viejas o siervos varones se la venían salvando o no existían): en algunos de esos mordiscos Erzsébet se entusiasmaba y se quedaba con trozos de carne entre los dientes. Para no escupir, los masticaba de buen grado y los comía con gusto. Esas eran las costumbre señoriales aceptadas por las víctimas, por lo que suponemos que deberían ser más o menos normales en la época y la región. De todos modos, no hacían popular a la condesa entre la gente de los alrededores.

El guerrero negro, luego de cuatro visitas al castillo que se tradujeron en tres hijas y un hijo, murió en 1604, dejando a Erzsébet viuda. Obviamente, su primera medida fue echar a patadas a la suegra del castillo. A continuación se rodeó abiertamente de sus delirantes secuaces brujas y comenzó a experimentar relaciones lésbico-sádicas (como la tía, pero peor) con las siervas y campesinas de los alrededores. Como tenía sus gustos, las exigía de entre 11 y 29 años y, dentro de lo posible, vírgenes, limpias y bonitas. Hombres excluidos.

Para sintetizar y sin entrar en pormenores, las torturaba a gusto (de ella, claro). Como algunas se le morían por las atenciones recibidas, el reclutamiento era continuo. Los habitantes de la zona empezaron a sospechar por la falta de noticias de sus hijas, hermanas, etc, pero era propio de la época y la zona acatar sumisamente y sin preguntas la voluntad de los señores. Delicias de la Edad Media.

Cuentan que la pasión por la sangre que la acompañó hasta su muerte se despertó en Erzsébet de forma ocasional. En una oportunidad en que una pobre sirvienta distraída le dio un tirón de pelo al peinarla, la condesa le propinó el previsible golpe en la cara, con tanto entusiasmo que le rompió la nariz. La hemorragia consiguiente salpicó la mano de Erzsébet, quien ya estaba tan loca que creyó ver que su piel rejuvenecía al ser bañada por la sangre. Entusiasmada por el revolucionario Helene Curtis que le devolvería la frescura perdida (ya tenía 44 años, venerable edad en esos tiempos) la condesa exigió un Body Care integral, para lo cual hizo desangrar a la pobre sirvienta por sus secuaces y ahí nomás se metió en una tina y se dio un chapuzón de sangre.

No creo que ninguno de ustedes haya tenido el placer, pero bañarse con sangre lo deja a uno bastante pegajoso y maloliente. Cuando se vio así nuestra heroína pensó que enjuagarse con agua y jabón, o lo que se usara en esa época, barrería con el rejuvenecimiento recién adquirido, por lo que se hizo lamer íntegramente por sus sirvientas, que además tenían que evidenciar que eso les encantaba, so pena de torturas.

Estos baños revitalizantes se hicieron costumbre, y durante aproximadamente seis años 612 doncellas (la condesa llevaba registros) donaron su sangre contra su voluntad en bien del cutis de la condesa. No sólo el cutis se beneficiaba; el desangrado se fue matizando con torturas de fuerte contenido erótico (para la condesa, no para las víctimas). Reitero que no quiero ser morboso; si quieren detalles búsquenlos en otros blogs, que abundan. El hecho es que conseguir servicio doméstico se convirtió en un serio problema en Transilvania. Además de la escasez por el exceso de fallecimientos, las postulantes eran cada vez más escasas. La cosa ya había trascendido, y las chicas se escondían o emigraban.

Semejante estado de cosas no podía durar. Movido por un sentimiento de justicia, (y también porque la condesa le había prestado enormes cantidades de dinero que no pensaba devolver), el rey Matthias de Hungría se animó a ordenar una investigación sobre esa elevada e intocable condesa. Envió al conde George Thurzo, primo de Erzsébet con un fuerte contingente al castillo de Čahtice.

Llegó Thurzo de improviso y encontró cadáveres tirados por los patios, doncellas desangrándose en los sótanos, horribles instrumentos de tortura, jaulas y sarcófagos con afiladas púas en su interior (“la dama de hierro”), que al cerrarse sobre sus eventuales ocupantes producían la previsible carnicería. El repugnante olor que flotaba en el castillo completaba el cuadro.

El proceso que siguió fue fielmente transcripto en registros, donde figuran las siguientes condenas:

Por su negativa a hablar, Darvulia (una de las brujas) fue condenada a que le cortaran los pechos y le sacaran los ojos, después de lo cual fue quemada viva en la hoguera.

Dos ayudantes de los crímenes, Jo Ann y Dorothea, fueron sentenciadas a que un verdugo les arrancara, con pinzas candentes, todos los dedos de las manos que habían usado en los crímenes. Después de eso, también fueron quemadas vivas en la hoguera. Un sirviente auxiliar, Ficzko, fue decapitado y desangrado, luego arrojado al fuego.

Erzsébet no fue nunca llamada a atestiguar, y nunca fue formalmente acusada. Privilegios de la nobleza. Un aristócrata no debe ser expuesto al escarnio de un juicio público.

El conde Thurzo, que había llevado a cabo los procedimientos, ordenó por su propia cuenta que Erzsébet sufriera arresto domiciliario en su propio castillo de Čahtice. Cuando terminaron los interrogatorios y quedó evidenciada la culpabilidad de la condesa, sin mediar sentencia ni juicio alguno Thurzo la emparedó en su propia alcoba, cerrando todas las aberturas y dejando sólo un orificio para pasarle la comida y el agua (y para retirar, se supone, los residuos orgánicos inevitables, por más condesa y noble que fuese)

Allí quedó la Condesa Sangrienta meditando, creemos, o tal vez ya loca de atar, hasta su muerte, cuatro años más tarde.

Al no haber sido condenada en juicio, su fortuna y posesiones quedaron en la familia. No tengo dudas de que las deudas del rey se perdieron en la conmoción.

Nos encontraremos nuevamente el 15 de octubre, con algo un poco menos siniestro, espero. Hasta entonces.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Conocía la historia, la verdad que aunque sangrienta, de lo más interesante... Yo, por mi parte, estoy preparando un mito, tambiñen con connotaciones vampíricas, pero solo se queda en eso, mito...

Besines!!!

Laonis dijo...

ME GUSTA TU BLOG, SON KOSAS MUY INTERESANTES, SI K SI

Laonis dijo...

ESO D CROMWELL Y TODO ESO YA LO SABIA Y TIENES RAZON KON ESO D EJEKUTAR AL KASAMENTERO, PERO PS ENRIQUE ERA UN REY MUY SADICO, TODO LO K EL DCIA ERA LEY Y KIEN SE OPUSIERA TERMINABA EN EL CALDASO, NO MERECIA SER REY...YO M ENTERE D K EL HIJO D ANA BOLENA SI ERA DEL REY, XQ ELLA NUNK SE AKOSTO KON NADIE MAS Y KE LE HABIA ENVIADO UNA KARTA AL REY, PERO CROMWELL LA DESTRUYO Y EL DIA K LO EJEKUTARON KONFESO SOBRE EL EMBARAZO D ANA, KOMO LA VES?

Jorge dijo...

Antes que nada, Laonis, muchas gracias por tu opinión. Espero que te siga gustando.
En cuanto a la hipótesis de la inocencia de Ana Bolena y las perrerías de Cromwell no había leído nada previamente; se me ocurrió por la entrevista secreta que dijo tener Cromwell con Ana, de la que informó al rey en secreto, manifestando públicamente que eran cosas demasiado horribles, y a raíz de lo cual Enrique endureció su posición. Cuando, años después, Enrique hizo ejecutar vilmente y con saña a Cromwell, no encontré otro motivo para esa sádica ejecución que el descubrimiento de la doblez de Cromwell. Además, Enrique mantuvo a Isabel en la línea de sucesíon, cosa que no hubiese hecho de haber confirmado el adulterio de Ana.
Bueno, en fin, hay para largo....No sé si cargar demasiado las tintas en el sadismo de Enrique. Sí era absolutista y violento, pero en esa época era bastante usual. Mira los Tudor: María la Sanguinaria, Isabel I, Jacobo, los regentes, la guerra de las dos rosas...

Un abrazo

Jose Andres dijo...

Hola, no he encontrado la manera de contactar contigo así que con tu permiso lo hago aquí.

En primer lugar darte la enhorabuena por tu blog.

Me llamo Jose y hace unos meses creé un blog para poder compartir mi afición por la historia.

Te pediría por favor que lo visitases, cualquier opinión tuya será tenida en cuenta a la hora de mejorar el diseño o los contenidos y sí te gusta y crees que merece la pena te pediría por favor que lo enlazases a tu blog.

De igual manera, cualquier otro consejo de alguien con tu experiencia será bienvenido, siendo sincero me gustaría que el blog llegase a cuanta más gente posible.

A mi, por supuesto, me gustaría tambien enlazarte si te parece bien, muchas gracias.

http://laestanteriadearriba.blogspot.com/

Jorge dijo...

Gracias, Joseandres, por tu comentario.
He visitado tu blog y lo leí con gusto. Muy bueno el diseño (se ve que te has tomado tu trabajo en serio) y el contenido, hasta lo que leí (mañana leeré el resto)muy bueno e interesante.
Con mucho gusto me enlazaré a él; para mí sería buenísimo que lo hicieras con el mío.

Un abrazo